Dos elecciones en Sudamérica podrían cambiar el terreno geopolítico allí. Primero, las elecciones presidenciales en Argentina. Luego, las parlamentarias en Venezuela. La lectura desde España es que regresa la pérfida derecha neoliberal. Pero lo que tenemos es que han ganado coaliciones transversales que aglutinan a buena parte de la oposición en los dos países con la peor situación macroeconómica del subcontinente. La gente ha votado en contra del partido gobernante por descontento, no por un nuevo alineamiento ideológico. Advierte Jorge Galindo en Politikon, que el voto en Venezuela no es una enmienda a la Revolución Bolivariana. Tanto en Argentina como en Venezuela se escuchaba eso de «el bueno era Chávez/Néstor, pero luego llego Maduro/Cristina…».
Es pronto para saber el alcance del cambio político. En Argentina, el nuevo presidente se encontrará un poder legislativo hostil y en Venezuela los nuevos parlamentarios se encontrarán un poder ejecutivo hostil. Sabemos que el nuevo presidente argentino pidió derogar el memorando de entendimiento con Irán y pidió sanciones para Venezuela. Habrá que estar atento al cambio de alineación de Argentina y la evolución de Venezuela.
Guerras Posmodernas 
La situación en ambos países va a ser un tira y afloja durante un tiempo dado que, como bien has apuntado, tanto el nuevo presidente argentino se va a encontrar un legislativo hostil, como el legislativo venezolano se va a encontrar un ejecutivo hostil. Pero creo que Maduro no ganará las próximas elecciones presidenciales en Venezuela y el kirchnerismo no ganará las próximas legislativas en Argentina, el descontento social en ambos países está muy extendido. Hasta entonces, el tira y afloja va a ser muy fuerte.
¿Y cuanto tiempo falta para esas futuras elecciones?
Como son regímenes presidencialistas en los que además se ha fortalecido la figura del presidente creo que en Argentina tienen mejores perspectivas que en Venezuela. Habrá que ver.
Algunas cosas de Politikon de verdad que me ponen enfermo. Que esto no es para cambiar las «políticas redistributivas» del Chavismo (así deben llamar a arruinar un país y comprar votos con prebendas). Con la arrogancia de quien parece saber lo que piensa cada venezolano. Con un par.
Ya veremos con el precio de todas las materias primas a la baja, si el nuevo gobierno de Macri, o el nuevo legislativo venezolano, pueden hacer una política económica generadora de empleo y riqueza. Lo más seguro es que los sindicatos peronistas o el chavismo revienten la política de estos nuevos políticos. Sinceramente, lo tienen muy difícil.