Jack Murphy es un veterano de guerra que sirvió en los Rangers y las fuezas especiales de Estados Unidos. Tras su servicio se diplomó en Ciencia Política en Columbia, ha escrito varias novelas y actualmente es editor jefe de SOFREP.com. Después de que saltara la noticia de que había contratistas sudafricanos en Nigeria, Jack logró una exclusiva mundial entrevistando para SOFREP.com. al director de la empresa, el mismísmo Eeben Barlow.
Conservo en mi biblioteca el número 10 de la revista Soldiers, publicado en de julio de 1996, donde apareció un artículo de Jim Hooper sobre la presencia en Sierra Leona de la primera empresa que fundó Eeben Barlow, Executive Outcomes. En enero de 1999 me volvería a encontrar con un artículo de la revista Soldier of Fortune con las actividades de esa empresa pero esta vez en Angola.

El asunto me impactó tanto que, diez años después de haber conocido el tema por primera vez, cuando presenté mi primera comunicación en un congreso académico lo hice sobre el papel de Executive Outcomes en la guerra civil de Sierra Leona. El texto, por cierto, terminó apareciendo como capítulo en el libro Los desafíos de las Fuerzas Armadas en el Siglo XXI coordinador por Carlos de Cueto.
Más tarde encontré el libro War Dog. Fighting Other People’s War. The Modern Mercenary in Combat de A. J. Venter, el autor del artículo que descubrí en Soldier of Fortune. Resultó que es una referencia mundial en torno a las guerras del África Meridional del último medio siglo. Aquel artículo abrió una pequeña ventana a un mundo que había dejado de ser secreto. Leí por último las memorias escritas por Eeben Barlow, Against all Odds, donde aportaba su punto de vista sobre el origen y trayectoria de la empresa. Pronto la colección Africa@War sacará un monográfico sobre Executive Outcomes. El tema ya forma parte de los libros de historia.

Barlow tiene un blog donde cuenta su visión de la conducción de la guerra y en un meses saldrá su libro Composite Warfare: The Conduct of Successful Ground Forces Operations in Africa. La entrevista que le hizo Jack Murphy apareció en varias partes. Barlow contó que trabajaba ahora para STTEP International y que había sido contratado para organizar una unidad con la intención específica de combatir a Boko Haram. Barlow no la nombra pero se supone que es la 72 Mobile Strike Force.
En la tercera parte de la entrevista se aborda las tácticas empleadas contra Boko Haram. Barlow habla de «persecución incansable». Ahí se me encendió la bombilla. ¿Persecución de los insurgentes en vehículos a pruebas de mina, combinadas con operaciones helitransportadas y empleando rastreadores? Estábamos sin duda ante la enésima evolución de las tácticas contra insurgencia aplicadas por Sudáfrica en la antigua África del Sudoeste (la actual Namibia).
Fui a la estantería y rescaté el primer tomo de la enciclopedia Comando y el fascículo nº47 «Guerra en el chaparral» de la enciclopedia Armas de Guerra, obras editoriales de finales de los ochenta y principios de los noventa. Y ahí leí de nuevo sobre las operaciones aerotransportadas «Fire Force» antes de saltar a Internet para buscar sobre la Rhodesian Light Infantry, los Selous Scouts, las pseudo operaciones, etc.

Así quedaba enlazada la cadena histórica. Rodesia fue el crisol donde se aplicaron las experiencias de Malasia, Kenia y Angola para crear algo nuevo. Ese conocimiento pasó a Sudáfrica y fue aplicada entonces en la actual Namibia. Tras el fin de la Guerra Fría, el personal sudafricano terminó en guerras como la de Sierra Leona y ahora en Nigeria.
Tras un tiempo de lecturas, de pronto, la semana pasada me entró el furor de escribí y en tres noches elaboré un artículo: «El legado africano de la contra insurgencia rodesiana». Lo mandé esta madrugada a la revista Ejército, que este mes sacará (si no pasa nada) un artículo mío sobre la Operación Serval.
El asunto podía haber quedado aquí cuando José Alcántara me preguntó si se trataba del primer capítulo de un libro. Bastantes proyectos de libro tengo aparcados a la espera de ser reorganizados como para complicarme más la vida. Pero una serie de artículos, ¿por qué no? Tras comentarme un colega en privado que las «columnas volantes» sudafricanas en Namibia habían sido estudiadas en un trabajo de investigación de los marines indagué un poco y empecé a buscar referencias. Al fin y al cabo hablar de los raids de las columnas de vehículos Ratel, Buffel, Casspir y Wolf Turbo tiene sentido considerando el viejo debate de las brigadas medias.

Así que tras escribir sobre la Operación Serval y la contra insurgencia en Rodesia, creo que merecería la pena escribir sobre la contrainsurgencia sudafricana en la actual Namibia durante los años 70 y 80. Mientras en inglés hay montañas de libros y decenas de páginas webs de asociaciones de veteranos, en español apenas se ha escrito sobre las guerras del África meridional. A excepción, claro del punto de vista cubano de la guerra de Angola. Pero allí hubo batallas bastante convencionales y quedan fuera de mi perspectiva.
¿Y que decir de otras guerras típicamente africanas, las «Toyota Wars» en Chad y Sudán? Abordé el asunto en «Swarming en el desierto». Con el Sahel de moda, creo que el asunto también merecería un artículo. Así que tenemos dos casos de contra insurgencia en las sabanas del África meridional (en las actuales Zimbabue y Namibia) y dos modelos de operaciones móviles en el desierto (las «Toyota Wars» y la Operación Serval). No sé si encontraré tiempo y bibliografía suficiente para abordar los dos artículos que faltan. Ni siquiera sé si a la revista Ejército le interesará mi artículo hablando de la contra insurgencia rodesiana. Pero ha sido divertido tirar del hilo a partir de una entrevista hasta escribir un artículo. Y quien sabe. A lo mejor algún día encuentro a alguien interesado en publicar un libro sobre las guerras africanas.
Un par de comentarios:
Cuando he visto la imagen de los miembros blancos de Executive Outcomes con la cara pintada de negro para parecer africanos a cierta distancia me recordó inmediatamente a los Selous Scouts (mencionados más adelante) Buscad las diferencias, 40 años después…
Y lo segundo es que persecuciones «en caliente» en territorio ajeno existen casi desde el inicio de las operaciones anti-guerrilla. Así, a bote pronto y por mencionar a las superpotencias, la de los soviéticos atravesando la frontera iraní detrás de muyaidines; y la de Pershing tras la pista de Pancho Villa en Méjico. A mencionar a un joven Patton atando al guardabarros de su vehículo el cadáver de un mejicano.
Esa foto con un autobús detrás me hace pensar en las incursiones en Mozambique.